LABORAL
Empleo Joven. El 17 de junio la Organización Internacional del Trabajo, en su cumbre anual, impulsó un Llamamiento Mundial a la Acción, con el objetivo de alcanzar una recuperación económica y laboral de la pandemia centrada en las personas. Recomiendan priorizar la creación de empleos decentes y abordar las desigualdades causadas por la crisis. Este acuerdo busca impulsar que los gobiernos tomen medidas activas para fomentar el empleo formal. Entre las recomendaciones de OIT sobresale que los distintos poderes ejecutivos faciliten la salida de la crisis económica a través de políticas de apoyo financieras, fiscales e industriales que fomenten la equidad y la estabilidad. En esa línea se espera que en los próximos meses los gobiernos impulsen iniciativas para apoyar la continuidad de la actividad empresarial en un entorno favorable a la innovación. También se prevé que promuevan el debate de medidas ejecutivas y legislativas para crear incentivos a aquellos empleadores que mantengan puestos de trabajo a pesar del descenso de la actividad.
Esta decisión surge a partir del informe publicado por OIT el 2 de junio en donde se desarrollan las “Perspectivas Sociales y de Empleo en el Mundo”. Este documento sostiene que la crisis que provocó la pandemia en el mercado laboral tendrá una recuperación lenta, con riesgos de alcanzar mayor desigualdad geográfica y demográfica, más pobreza y menos trabajos dignos. En particular, la OIT destaca el impacto sobre el empleo juvenil, con una caída a nivel mundial del 8,7% durante 2020 y un agravamiento en las disparidades de género. Con miras al futuro, destacan que el crecimiento del empleo previsto será insuficiente para cerrar las brechas creadas por la pandemia, y que los adultos jóvenes verán las consecuencias de la perturbación de la experiencia temprana en el mercado laboral durante años.
De esta manera, la OIT destaca el déficit de puestos de trabajo derivado de la situación sanitaria mundial, estimando que alcanzará 75 millones en 2021. A esto se le suma un déficit en horas de trabajo que asciende al 3,5%, aproximadamente 100 millones de empleos a tiempo completo. Para 2022, se espera que 205 millones de personas se encuentren desempleadas en todo el mundo. Este efecto tuvo su mayor repercusión en los trabajadores más vulnerables de América Latina y el Caribe, Europa y Asia Central durante el primer semestre de 2021.
Asimismo, la publicación remarca que la caída en el empleo y las horas laborales se tradujo en una reducción de los ingresos y un aumento de 108 millones de personas en la categoría de trabajadores pobres o sumamente pobres, demorando los avances globales de los últimos cinco años hacia la erradicación de la pobreza laboral.
Próximos pasos
El director general de la OIT, Guy Ryder, remarcó la importancia de desarrollar una estrategia integral y coordinada con claros lineamientos de acción y financiación basada en políticas centradas en las personas para aproximarse nuevamente a una recuperación real del mercado laboral. Aunque el Llamamiento Mundial a la Acción de la OIT no tiene un carácter vinculante, cuenta con el respaldo de delegados de 181 países. En ese sentido, se espera que en el mediano plazo tanto los gobiernos nacionales, las empresas y los organismos internacionales trabajen en la elaboración de políticas públicas que se centren en la promoción del crecimiento económico de base amplia y la creación de empleo productivo; el apoyo a los ingresos de los hogares y la transición en el mercado de trabajo; el fortalecimiento de los fundamentos institucionales necesarios para un crecimiento y un desarrollo económicos inclusivos, sostenibles y resilientes; y el uso del diálogo social para formular estrategias de recuperación centradas en lo humano.