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El acuerdo con Repsol ya tiene dictamen del Senado
Argentina
20 marzo 2014

(Cámara de Senadores – Plenario de Comisiones de Minería, Energía y Combustible, y de Presupuesto y Hacienda – Reunión del 19 de marzo de 2014) Con fuertes críticas de los legisladores de la oposición, el Gobierno logró la aprobación del dictamen por el acuerdo con Repsol por la expropiación del 51 por ciento del paquete accionario de YPF en las comisiones de Energía y Presupuesto y Hacienda del Senado. La próxima semana sería tratado en el recinto de la Cámara y llegaría a Diputados en abril.

En el último encuentro del plenario volvieron a haber varios cruces. El primero fue entre el radical Ernesto Sanz (Mendoza), el socialista Rubén Giustiniani (Santa Fe) y el kirchnerista Aníbal Fernández (Buenos Aires). Fue por los controles a los que se debe someter o no la empresa en su carácter de sociedad anónima. “Es una decisión política que YPF sea una sociedad anónima. No es como cualquier empresa del estado”, aseguró el oficialista, a lo que Giustiniani respondió: “Es un disparate que no conozcamos el acuerdo con Chevron por el hecho de que sea una sociedad anónima. Viola el sentido común”.

Se sumó a la discusión el senador Marcelo Fuentes (FPV-PJ-Neuquen), quien defendió que el convenio firmado con la petrolera norteamericana sea secreto. “Lo que es público es lo que fue ratificado por la provincia de Neuquén, que es su propio acuerdo con la empresa. Pero YPF es una sociedad anónima y como tal no debe revelar el detalle del convenio”, subrayó.

El segundo choque se dio, minutos después, cuando Fernando “Pino” Solanas (Alianza UNEN-CABA) le contestó a Fuentes. “Acá nadie tiene idea de los daños ambientales ni de cuanto se debería pagar por la expropiación. YPF se hará cargo de los futuros pasivos, que van a ser enormes”, acusó el legislador de UNEN, aunque luego llamó a la calma: “ojalá superamos posiciones sectarias”.

A la última sesión del plenario de comisiones en el Senado fue invitado el ex secretario de Energía del gobierno de Raúl Aflonsín, Gustavo Calleja. “El gobierno se equivoca. Hace mal este negocio, como lo hizo mal la expropiación, había q negociar con el gobierno de España”, arrancó. “Cinco mil millones [de dólares] no es mucho para estos negocios, pero sí lo es para la Argentina. Vaca Muerta es un pozo piloto”. Y precisó que, en cinco años, Repsol se llevó 15 mil millones de dólares.

Consideró, además, que si el Gobierno ofrecía de entrada un monto menor la petrolera española hubiera aceptado. También criticó el acuerdo con Chevron y el sistema de fracking por el daño medioambiental que generará. “¿Qué le hace pensar que el fracking contamina?”, lo apuró el presidente de la Comisión de Energía, Guillermo Pereyra (Movimiento Popular Neuquino-Neuquén). “El agua recircula”, agregó, y Fernández lo acompañó en el planteo. El titular del bloque oficialista del Senado, Miguel Pichetto (FPV-PJ-Rio Negro), quien se definió como un hombre de “pensamiento pro minero”, también le consultó al experto si creía que el Estado tenía la capacidad de afrontar los 200 mil millones de dólares necesarios para explorar el yacimiento Vaca Muerta.

En el fragor del debate, Callejas no llegó a responderle a ninguno de los dos.

También participaron representantes de la Asociación de Superficiarios Patagónicos (ASUPA), que aseguraron que “la industria extractiva puede convivir con la agricultura y generar muchos puestos de trabajo”, aunque se negaron a detallar el monto que debería pagársele a Repsol por la expropiación.

Si el Senado logra darle media sanción al proyecto, la Cámara de Diputados tendrá un mes para tratar el acuerdo, ya que el Gobierno planteó con Repsol el 1 de mayo la fecha tope para que el Congreso apruebe el convenio.

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