(Cámara de Senadores – Mesa de Entradas – 19 de Julio). Ayer por la noche ingresó en la Cámara de Senadores el proyecto de ley que presentó Cristina Fernandez de Kirchner para cambiar la jurisdicción bajo la cual se efectúan los pagos para los bonistas restructurados –holdouts- y efectivizarlos en la Argentina. Será girado a las comisiones, presididas por oficialistas. El proyecto se podría convertir en ley antes del 30 de septiembre.
El Expte. Nº P-307-2014, presentado por el Poder Ejecutivo y firmado por la Presidenta de la Nación, contempla el pago de los fondos buitres, es decir, ese 7,6% de los bonistas que no habían aceptado la reestructuración de la deuda.
Al igual que los canjes anteriores de la deuda, en este caso también se hará la quita de los que ingresaron en las reestructuraciones de 2005 y de 2010 y recordó que “con el primer canje del 2005 se logró un acuerdo con el 76% de los acreedores que aceptaron quitas de hasta el 65 por ciento”
El proyecto autoriza al Ministerio de Economía a “remover al Bank of New York Mellon (BONY) como agente de pago de bonos de acreedores”, y designar “en su lugar a Nación Fidecomiso”, para llevar adelante esos pagos. También aclara que la totalidad de los tenedores de bonos y de aquellos que no ingresaron a los canjes implementado en 2005 y 2010 “podrán elegir un fideicomiso tal como lo establecen sus derechos”
La iniciativa considera la deuda soberana de “interés público” y declara que la sentencia de Griesa es de “imposible cumplimiento” y “violatoria tanto de la soberanía como de las inmunidades [del país] y los derechos de terceros”.
El proyecto cuenta con un primer giro a la Comisión de Presupuesto, presidida por el kirchnerista, Anibal Fernández (FPV-PJ-Buenos Aires). Luego pasará a la Comisión de Relaciones Exteriores, a cargo de otro oficialista, Ruperto Godoy (FPV-PJ-San Juan).
“Podría ser sancionado antes del 30 de septiembre”, declaró esta mañana Juliana Di Tulio, Presidente del Bloque del Frente para la Victoria en la Cámara de Diputados. La jefa de la bancada vaticinó: “No creo que no haya acompañamiento de la oposición”, y agregó: “Queremos dar certeza, queremos demostrar que la Argentina no sólo habla, sino que tiene capacidad y que hace”.
La diputada oficialista también afirmó que se trató de “una decisión acertada y valiente” y mostró, una vez más, su apoyo al gobierno: “Me llena de orgullo que la Presidenta haya tomado esta decisión”. También recordó que “este no es el gobierno que se ha endeudado, pero si el que ha pagado la deuda religiosamente con inclusión y con crecimiento”.