NUTRICIÓN

Alimentación saludable. Durante el mes de abril, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) presentó dos guías diseñadas para orientar a los parlamentarios en acciones en torno a promover la nutrición saludable. El primer reporte fue presentado ante el Parlamento Latinoamericano (PARLATINO) y el segundo junto con la Unión Interparlamentaria (UIP). Ambos documentos recomiendan a los parlamentarios legislar sobre la totalidad de la cadena de suministros de alimentos promoviendo medidas que aseguren acceso a alimentos más sanos. Aunque los manuales no tienen carácter vinculante, las entidades autoras aspiran a que estas prioridades sean incluidas en los debates regulatorios impulsados por los poderes legislativos nacionales a la hora de regular al sector alimenticio. 

Los documentos señalan que los parlamentarios y asesores desempeñan un rol clave por su posición estratégica, ya sea promoviendo las inversiones públicas en el sector agrícola, estableciendo las condiciones para la promoción de la inversión privada, o fomentando el diálogo entre los diferentes agentes de incidencia. Ambos documentos ofrecen una orientación en torno a cinco áreas en que los legisladores pueden adoptar medidas concretas como la representación, el presupuesto, la fiscalización y la legislación. Dentro de este último punto, el segundo informe menciona la identificación de vacíos legales, la promoción de una ley marco nacional y de un plan multisectorial en materia de nutrición, la promoción de leyes sectoriales en torno a dietas saludables, y el intercambio de información regional acerca de buenas prácticas. 

Asimismo los dos informes hacen hincapié en la importancia de la cadena de suministro de alimentos, que abarca toda la gama de actores y sus actividades interrelacionadas que añaden valor social, cultural y económico a la producción, agregación, procesamiento, distribución, etiquetado, comercialización, consumo y eliminación de productos alimenticios.  Ante eso la FAO considera imprescindible el impulso de medidas que regulen al sector desde una perspectiva holística. 

Próximos pasos

Ambos documentos de la FAO pretenden ser una guía de notas de orientación, buenas prácticas e indicaciones para miembros de los Poderes Legislativos, a quienes consideran “agentes de cambio”. De esta manera busca apoyar la adopción de medidas en torno a la inversión agrícola responsable, y la priorización de la nutrición, para la transformación hacia sistemas alimentarios más sostenibles. El primer informe, incluso, brinda consejos de incidencia y comunicación para los legisladores. Aunque no son vinculantes, la FAO confía en que estos consejos sean tomados por los parlamentarios de la región para promover políticas y construir alianzas sólidas en torno a la sostenibilidad de los sistemas alimentarios.