SOSTENIBILIDAD

Sistemas eficientes de agua. Entre el 22 y el 26 de marzo, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) realizó una serie de eventos virtuales con el objetivo de revalorizar la atención y tratamiento del agua. En ese marco desde el organismo presentaron una serie de recomendaciones como dar un tratamiento regulatorio integral al procesamiento de aguas, combinando el control de la calidad/cantidad del agua, manejando la cantidad de agua a través de políticas que controlan la demanda; promoviendo su uso eficiente y asignandolo a las zonas que más lo necesitan. También recomienda revisar prácticas que afecten su disponibilidad; reducir y controlar la contaminación del agua; y facilitar la incorporación y difusión de nuevas tecnologías innovadoras. Aunque no son vinculantes, la OCDE aspira a que los lineamientos ayuden a los gobiernos a fortalecer sus políticas de protección de los recursos hídricos. 

Durante el primer encuentro, el secretario general de la OCDE, Ángel Gurria, presentó guías de políticas de agua junto con testimonios de ministros sobre los desafíos críticos que habrá de afrontar en el futuro. Se acompañó esta discusión con la presentación de las recomendaciones del Consejo, que resumen el proceso consultivo de la OCDE con actores clave en la gobernanza del agua para: manejar la cantidad de agua; mejorar su calidad; prevenir riesgos y desastres; asegurar su buena gobernanza; y garantizar el financiamiento sustentable de servicios e infraestructura. 

Por otro lado, también se destacó la importancia de saneamiento, higiene y acceso adecuado al agua que desveló la pandemia de COVID-19, dado que los niveles de contagio del virus empeoraron en zonas con condiciones de vida precarizadas, sin acceso a facilidades para higienizarse con agua limpia. Además, se dedicaron sesiones específicas para abordar las situaciones particulares en las regiones de África, América Latina y el Caribe, y Asia Pacífico.

Próximos pasos

Las recomendaciones presentadas por el Consejo de la OCDE no tienen carácter vinculante, sin embargo se espera que los gobiernos incorporen las sugerencias en el manejo de sus sistemas de agua para responder a la necesidad global de garantizar su suministro y saneamiento de una manera efectiva y sustentable.