(Cámara de Diputados – Mesa de Entradas del 10/10 al 24/10/2014). El diputado opositor Alberto Asseff (UNIR-Buenos Aires) presentó un proyecto de ley para crear el Régimen de incentivos a la industria de tecnologías de la información “con el objeto de promover la producción y difusión de los productos tecnológicos con alto valor agregado en el territorio de la República Argentina, para contribuir a la reducción de la brecha digital, conectividad e informacional de la población”.

A través del Expte. Nº 8177-D-2014, el diputado de UNIR asegura que “busca conceder una serie de incentivos para concretar proyectos de producción de bienes tecnológicos presentados por empresas argentinas o radicadas en el país”, y en particular “busca promover el sector tecnológico a través de distintos beneficios fiscales y arancelarios, todo ello en un marco de un plan progresivo de integración nacional”.

Quedan comprendidas dentro de esta ley, las empresas que desempeñen actividades destinadas a la producción y/o ensamblado de los bienes terminados. Asimismo establece que, para la adhesión al régimen, “las empresas deberán presentar un plan de producción quinquenal y un programa de importaciones y exportaciones”.

El proyecto también establece que las empresas “deberán acreditar o comprometer inversiones no inferiores a una suma equivalente a dólares estadounidenses un millón (u$s 1.000.000)”, que puede ser en activos fijos; en inmuebles e instalaciones directamente relacionados con el proceso productivo enunciado en el plan o en bienes de capital o su financiación.

Respecto de los incentivos, el proyecto presentado establece que “las partes, piezas y componentes importados podrán representar hasta un cincuenta por ciento (50%) del valor ex fábrica”. A partir del segundo año del plan aprobado, el contenido máximo será del 45%; en el tercero el 40%; en el cuarto del 35% y en el quinto del 30%.

Aseff también prevé un bono fiscal para el pago de impuestos nacionales, con excepción de aquellos gravámenes con destino a la seguridad social o de afectación específica. Respecto de aranceles, el proyecto de ley establece que se hará una reducción del arancel durante los primeros cinco (5) años del 60% del derecho de importación intrazona y extrazona para partes, piezas, y componentes destinados a la producción y/o ensamblado de los bienes; hasta el 40% del derecho de importación intrazona y extrazona para “CompletelyKnocked Down (CKD)” y “SemiKnocked Down (SKD)” y hasta el 20% del derecho de importación intrazona y extrazona para bienes completos y armados “CompletelyBuilt Up (CBU)”.

Asseff argumenta que “muchos de los insumos en esta industria son adquiridos hoy por hoy en el exterior”, por lo que impulsa la promoción del desarrollo tecnológico. Pero también hace hincapié en la necesidad de un desarrollo nacional: “La fuerte concentración de actividad económica que caracteriza a provincias como Buenos Aires, en comparación con el resto del país, es altamente perjudicial para el desarrollo económico del resto de los distritos, al concentrarse en la primera las principales actividades industriales”.

Para concluir, el diputado solicita cumplir con el principio constitucional del “crecimiento armónico de la nación”, y promover así “el progreso equilibrado de las distintas regiones de nuestro país, al fomentar los distintos sectores que componen la industria de la tecnología en numerosos puntos de la nación”.